Desde estos últimos años la contaminación se ha vuelto un apartado importante para los gobiernos. De hecho, la DGT y muchos ayuntamientos ya empiezan a establecer las ZBE (Zonas de Bajas Emisiones). Por lo tanto, muchos vehículos no podrán cruzar ciertos umbrales, así que se vuelve necesario venderlos, por temas laborales o de otra índole.
Aquellos que no quieran comerse demasiado la cabeza a la hora de vender su coche, lo más sencillo es acudir a un profesional. En otras palabras, ir a un concesionario es una buena opción, ya que suelen aceptar vehículos usados como parte de un intercambio para la compra de uno nuevo. Puedes obtener una cotización y compararla con otras opciones.
No obstante, cabe recordar que la venta a profesionales no deja de ser un negocio, es decir, se busca la rentabilidad y el beneficio. Así pues, es muy aconsejable que, si se opta por esta opción, ir a varios de ellos y quedarse con la mejor oferta.
El mundo de las redes: gran oportunidad para vender tu coche
En el mundo actual que vivimos, con las redes gobernando nuestra vida, internet se vuelve un aliado fundamental para la venta de coches. Por ello, es recomendable publicitar tu coche en aplicaciones o portales web en las que tú mismo estableces el precio.
Hay que usar a nuestro favor las nuevas herramientas que brinda Internet
Además, te ahorrarás muchos gastos y tendrás un mayor alcance al no existir límites geográficos. En esto las redes sociales también juegan un papel relevante. En un mundo tan globalizado hay que saber aprovechar las oportunidades para vender el coche.
Esta misma es muy interesante para aquellos vehículos que tienen ciertos años y kilómetros. De hecho, los profesionales tienen que aportar una garantía, lo cual hace que su venta se más difícil de realizar.
Los particulares tienen la ventaja de obtener buenos beneficios, pero todo ello conlleva mayor esfuerzo y trabajo. Deberás cubrir todos los aspectos, desde el papeleo, las negociaciones, crear el anuncio…
La compraventa: otra buena opción para vender tu coche
En la compraventa el proceso suele ser más rápido. No tendrás que lidiar con llamadas de particulares, resolver dudas o concertar citas para mostrar el coche. Además, se encargarán de gran parte del papeleo necesario para transferir el vehículo.
Sin embargo, tiene unas desventajas claras, ya que los compraventas suelen ofrecer un precio más bajo que si vendieras el coche directamente a un particular. Esto se debe a que ellos necesitan obtener ganancias al revenderlo. Si buscas obtener el máximo valor por tu vehículo, venderlo a un particular podría ser más beneficioso.
En definitiva, la venta del coche se ha convertido en una cuestión casi obligatoria para muchos conductores. Las pegatinas medioambientales y las ZBE provocarán que los coches más viejos no puedan circular por ciertas zonas. Así pues, siempre podrás optar por estas opciones para vender o por el desguace, la menos rentable económicamente pero las más sencilla.
