El judo español está a un paso de acabar con su mala racha olímpica. Veinticuatro años sin subir al podio en unos Juegos son muchos para un deporte en el que España brilla en Mundiales y Europeos. Pero desde el oro de Isabel Fernández en Sidney 2000, sequía. La llave que abrirá el podio olímpico está cerca, muy cerca. Fran Garrigós (-60 kg) y Laura Martínez (-48) se han clasificado para las semifinales en París. Dos oportunidades de medalla. Si ganan, pelearán por el oro. Si pierden, se van a la repesca y pelearán por el bronce.
Todas las quinielas situaban al madrileño en el podio tras llegar como campeón del mundo en 2023 y tres veces campeón de Europa. Fue el primero en saltar al tatami olímpico de un pabellón casi abarrotado. Se podían contar perfectamente el número de asientos libres de los pocos que había. El ‘Arena Campos de Marte’, con capacidad para más de 8.000 personas, no paró de jalear y vibrar en toda la mañana. Era el escenario ideal para hacer historia. Prácticamente a los pies de la Torre Eiffel.
La barrera mental del primer combate
En ese ambiente comenzó su camino hacia la medalla olímpica el madrileño, que debutó con una sufridísima victoria ante el belga Jorre Verstraeten, a quien en ocasiones anteriores había ganado con facilidad. «Los Juegos tienen algo especial, la gente viene súper tensa y cuesta más de lo normal. Los primeros combates son a cara de perro, durísimos», reconocía Quino Ruiz, su maestro.
El de Móstoles había caído en el primer combate tanto en Río 2016 como en Tokio 2020, por eso ganarlo fue como quitarse una losa de encima. Fue tan ajustado que se lo llevó el español en el punto de oro por Waz-Ari.
Pero ya estaba en cuartos. Garrigós, cuarto cabeza de serie, fue otro ante el japonés Ryuju Nagayama, segundo del ranking mundial de -60 kg. y uno de los favoritos al podio. Plata en Río 2016 y bronce en Tokio 2020. El español nunca le había ganado hasta hoy pero en el tatami se mostró segurísimo. Un ippon por estrangulamiento a falta de un minuto para que se cumpliese el tiempo reglamentario le dio el pase a semifinales. Un pasito más cerca de la medalla. El japonés no quiso darle la mano al final.
«Cuando un competidor pierde el conocimiento por estrangulación, automáticamente es ippon. No sé de qué se queja», dijo Quino.
En semifinales le espera el kazajo Yeldos Smetov, número 22 del ranking mundial El combate será esta tarde, en torno a las 16:40.
El debut soñado
Laura Martínez, al igual que Garrigós, se entrena bajo las órdenes de Quino Ruiz en Brunete en un Dojo que es una fábrica de campeones. De allí han salido 5 de los 9 olímpicos qque competirán en París.
Después fue el turno de Laura Martínez en -48 kilos. La madrileña, que no estaba exenta de la primera ronda, debutó en sus primeros Juegos ante la chilena Mary Dee Vargas, duodécima cabeza serie, con una victoria. En sus primeros Juegos Olímpicos, la madrileña se llevó el combate gracias a un Waza-ari (O-uchi-gari) en el minuto 3:09. Su rival se entrena en Valencia junto a la española Julia Figueroa, que en París ha ejercido como su entrenadora.
En octavos, la vallecana se impuso a la serbia Milica Nikolic en el punto de oro con un ippon y en cuartos a la kazaja Abiba Abuzhakynova. La madrileña competirá esta tarde por entrar en la final frente a la mongola Baasankhuu Bavuudorj.
