Con una cuota de mercado superior al 90% está claro que Google es el buscador más utilizado de la red. Ahora, también, se puede decir que es un monopolio. El juez federal estadounidense Amit Mehta ha dado la razón al Departamento de Justicia del país en uno de los casos que podrían alterar para siempre el modelo económico de Google y también el de muchas otras empresas, incluida Apple.
Tras un proceso que ha durado más de un año, Mehta ha sido muy claro en su veredicto. «Google es monopolista, y ha actuado como tal para mantener su monopolio», explica en su sentencia.
En ella expone que los pagos a plataformas para ser la opción de búsqueda por defecto en los navegadores es una de las razones por la que Google mantiene el dominio del mercado y ha tenido un impacto evidente en los precios del mercado publicitario en la red. Al comprar esta posición privilegiada, argumenta el Departamento de Justicia, Google no tiene que esforzarse tanto en ofrecer un producto competitivo.
En 2021, uno de los años que se usaron como ejemplo durante el juicio, Google invirtió casi 26.000 millones de dólares en acuerdos con varias compañías para garantizar su posición privilegiada dentro de los diferentes sistemas operativos.
La mayor parte de ese dinero (unos 18.000 millones) fue a parar a Apple, que tiene un amplia base de usuarios en EE.UU. pero que, incluso en territorios donde la cuota de mercado de los iPhone es baja, el mayor poder adquisitivo de los compradores típicos de iPhone hacen que ser el buscador por defecto en la plataforma resulte muy apetecible para Google.
La cifra se ha convertido en una de las principales fuentes de ingresos para la compañía de la manzana, de hecho. Representa más del 17% de sus beneficios anuales. Supone también más de una tercera parte de todo el negocio generado por el buscador de Google.
Aunque los abogados de Google han tratado de defender que los internautas usan su buscador porque es el que mejor resultados ofrece, Mehta cree que ser la opción por defecto es la dinámica que ha impedido a las alternativas crecer en cuota de mercado. Como ejemplo apunta a que Bing, el buscador de Microsoft, tiene cerca de un 80% de mercado cuando se considera sólo el navegador web de Microsoft, Edge, que lo utiliza por defecto.
En la sentencia, el juez reconoce que Google ha trabajado para ofrecer una buena experiencia de búsqueda y no degrada la calidad del servicio a pesar de ser un monopolio, pero impide que las alternativas sean económicamente viables y se beneficia de su dominio del mercado aumentando los precios de la publicidad que muestra en los resultados.
La sentencia no incluye de momento ninguna directriz para Google porque Mehta entiende que la compañía apelará el veredicto pero Bing y Microsoft podrían ser las más beneficiadas. También refuerza la posición del Departamento de Justicia en otros casos de monopolio abiertos contra las grandes compañías tecnológicas, incluidas Apple, Meta, Amazon o la propia Microsoft.
Llega también en un momento de incertidumbre para el mercado. El auge de las herramientas de inteligencia artificial generativa y los bots conversacionales ha abierto la puerta a cambios en la forma de buscar respuestas en la red. Tanto Google como Microsoft están experimentando con nuevas formas de búsquedas con respuestas directas generadas por inteligencia artificial en lugar de mostrar una lista de enlaces
