Se enfundó la camiseta del Barça por primera vez en 13 meses. Flick decidió dar a Ansu Fati los últimos minutos en el Principado de Mónaco y con el partido contra las cuerdas. Con el Barça a la desesperada buscando el empate, a la heroica y con más corazón que piernas y cabeza. Un contexto complicadísimo que desembocó en que el futbolista nacido en Guinea Bissau apenas tuvo una intervención.
Era el primer capítulo de Fati en el ‘Universo Flick’. Tanto el técnico germano como el staff tienen un plan diseñado para él. Una hoja de ruta que se inicio ya nada más aterrizar en la Ciutat Esportiva Joan Gamper, que se truncó por esa inoportuna fascitis plantar antes de viajar a la gira americana.
HOJA DE RUTA TRUNCADA
Un paréntesis de un mes aproximadamente en el que el delantero se puso manos a la obra para lidiar con una lesión complicada, de difícil pronóstico. Pero lo cierto es que el trabajo de preparadores y fisioterapeutas fue el idóneo y adecuado y en un tiempo corto el jugador cedido el curso pasado en el Brighton volvió a pisar el verde. Y en apenas unos días se incorporaba con el grupo. Buenas sensaciones.
Ansu Fati, concentrado / Javi Ferrándiz
Hansi Flick ha estado personalmente monitorizando a Ansu a lo largo de todas estas sesiones. Demostrándole afecto y confianza en su fútbol, en que pueda recuperar ese tarro de las esencias que mostró en unos inicios meteóricos. O, por lo menos, que pueda ofrecer una buena versión. Un poco de Ansu es mucho.
Cuando está en el campo Ansu se divierte mucho y marca muchos goles en el entrenamiento
Dentro del plan elaborado por el staff, entrar en la lista este jueves para Mónaco era uno de los primeros pasos. Y Hansi ya dejó claro en la rueda de prensa previa que podía tener incidencia el atacante: «Ansu está listo para jugar. Sé cuál es su posición favorita, pero no lo voy a decir aquí, mañana podréis ver en qué posición juega. Cuando está en el campo se divierte mucho y marca goles en los entrenamientos».
GRANDES SENSACIONES
Como hemos ido comentando en SPORT, en el día a día Fati está entrenando a un alto nivel. Con chispa, viendo puerta. Capaz de aguantar intensidades altas. Y eso no pasa por alto para Flick, que ayer en Mónaco lo ubicó como extremo izquierdo, trazando hacia adentro, en los últimos minutos.
Apenas tuvo tiempo de tener incidencia el jugador. Era solo el comienzo. La idea es que progresivamente vaya ganando presencia. Hansi tiene las alternativas que tiene en ataque y cree que Ansu puede ser muy útil. Domingo, ante el Villarreal (lógicamente luego las circunstancias de partido mandan), Fati tendrá más minutos.
ADQUIRIENDO PROTAGONISMO
Necesita reencontrarse con el ritmo de partido y de competición. Y tiene números de, dependiendo de nuevo de contextos y demás, poder ser titular ya ante el Getafe en Montjuïc o el siguiente fin de semana en Pamplona ante Osasuna. Vienen muchos partidos y mucha carga. La segunda jornada europea ante el Young Boys, el Alavés. Y luego el parón.
Todo irá en función también de la confianza y el nivel que dé el jugador claro. Flick está convencido de que puede aportar mucho y ser relevante en su Barça, pero a partir de ahora ya todo reside en el jugador. En su finura. En el tono que muestra y en lo que sume.
