Dos jornadas, dos victorias. El Barça de Carlos Ortega, vigente campeón, ha arrancado la liga ASOBAL con mano de hierro y tras superar a Bada Huesca en el estreno, hizo lo propio a domicilio con Bidasoa Irún, uno de los aspirantes al título. Un duelo intenso, que obligó a ambos contendientes a poner todo sobre la pista pese a lo que reflejó el marcador final (30-36).
Esperaba el Barça un encuentro difícil en la única pista en la que se dejó puntos la temporada pasada (26-26 en la primera jornada). Artaleku, con lleno absoluto, apretó a los suyos que durante los primeros minutos consiguieron mantener controlado a su rival pese a ir por detrás en el marcador. Con el 5-9 anotado por Petar Cikusa pidió tiempo muerto de Alex Mozas para cortar la racha.
La diferencia se mantuvo corta, oscilando entre los dos y tres goles y cuando alcanzó los cinco, el técnico de Bidasoa empezó con las rotaciones. El desparpajo de los jóvenes irundarras se hizo fuerte sobre el azul y acompañado por el acierto de Skrzyniarz la renta azulgrana se redujo a la mínima expresión a cinco para el final de la primera mitad.
Aleix Gómez, desde los siete metros, y Frade devolvieron el +3 al marcador, aunque Asier Nieto volvió a maquillar la cuenta. Cikusa, con su cuarto gol en el partido, se encargó de cerrar el tanteo antes del descanso, atacando desde la derecha (15-18).
Caen las defensas
La dinámica apenas varió tras el pase por vestuarios, con rágafas de alta intensidad, poca pausa en el juego y más pararadas de Skrzyniarz para mantener con opciones a su equipo. El Barça, por su parte, se apoyaba en un afinado Richardson que acabó como máximo goleador del partido, y en un activo Petar Cikusa.
Con el paso de los minutos el ritmo frenéntico del inicio fue decayendo. Las jugadas pasaron a ser más largas, más trabajadas, con pausa. Un terreno en el que se sentía bien el Barça que tiró de oficio para situar la diferencia en cinco goles. Parecía que el final sería tranquilo pero, como en la temporada anterior, Bidasoa obligó a emplearse a fondo al Barça para cerrar la segunda victoria liguera del curso.
