En la madrugada del 23 de junio de 2020, el fundador de Gestmusic, Josep Maria Mainat entró en coma y estuvo a punto de morir. La pareja había discutido y la alemana aprovechó que el productor estaba dormido para inyectarle insulina, sabiendo que él era diabético y que le podía provocar una hipoglucemia grave.
Sin embargo, la mujer aseguró que le intentó salvar la vida inyectándole un medicamento para adelgazar: «No, no quise a mi marido muerto, sino que lo quería conmigo (…) Le di el sobre de glucosa e hice todo lo posible para salvarle la vida».
Finalmente, la Audiencia de Barcelona condenó a cuatro años y seis meses de prisión a Dobrowolski por lesiones a Josep Maria Mainat. Anoche se estrenaba nueva temporada de ‘Col·lapse’ y sentaba en el plató a Josep María Mainat, quien hablaba de una manera muy clara sobre la sentencia que encontraba culpable y que condenaba a su exmujer.
“Llevo cuatro años preguntándome cómo es posible que en un momento determinado que un día se le gire el cerebro”, ha comentado el productor. Mainat explicaba que su relación se fue deteriorando mucho antes de aquella noche.
Según Mainat, “era por dinero”, un plan premeditado para evitar quedar fuera de la herencia, lo que llevó a Dobrowolski a actuar de manera tan fría y calculada.
Según Mainat, una de las causas para que su exmujer cambiara tanto era por el consumo de drogas: «Ella consumía y este consumo, hay persona que tienen más tendencia a engancharse que otras, y ella era de engancharse mucho. Este consumo hizo que perdiera la cabeza. Y que no solo actuara en este caso, sino en muchos otros escenarios que hizo, como dedicarse a poner bombas, robar por las casas. Era una persona que no tenía nada que ver con la que yo me casé y me enamoré».
Pese a todo, ha dejado claro que aún guarda buenos sentimientos para su exmujer: “Yo no he dicho que me haya desenamorado. La quiero. Me sabe muy mal que esté como está y que haya llegado donde ha llegado. Se ha convertido en otra”.
