La gran duda con Savinho en el Manchester City era cuántos minutos de juego podía tener y en qué posición. Cinco jornadas de Premier League después, la gran incógnita es hasta dónde puede llegar el brasileño.
En LaLiga, y especialmente en Montilivi, eran realmente conscientes del incalculable talento de Savinho. Su entrenador en el Girona, Míchel, aseguraba en su momento que «nunca había visto un talento en el uno contra uno tan desequilibrante como él«. Ahora, la Premier League lo está gozando en sus propias carnes.
UN ‘CICLÓN’ ANTE CALAFIORI
La exhibición del brasileño ante el Arsenal (2-2) fue impactante. Partió en la banda derecha, emparejado con uno de los defensas más cotizados del mercado, Riccardo Calafiori, fichaje estelar del cuadro ‘gunner’ este verano (45 millones de euros), y lo volvió completamente ‘loco’.
Savinho-Calafiori, un duelo estelar en el City-Arsenal / AP
El italiano sufrió de lo lindo, desde bien temprano, y rápidamente supo que, cada vez que Savinho le encarase, seguramente le tocaría perseguir a una sombra en dirección a su portería. Esa era la intención de Guardiola, generar situaciones para que el ex del Girona impusiera su magia ante Calafiori. Por lo menos, eso parecía Le pedía cuando a los pocos segundos de partido se paraba el choque porque Rodri se iba al suelo por un choque con Havertz.
Siete minutos después, dejó totalmente ‘roto’ a Calafiori con un control orientado de escándalo y sirvió un auténtico ‘regalo’ a un Haaland que no podía desaprovechar tal envío en el mano a mano contra Raya. Después de la grave lesión de Rodri, el italiano empataría el choque con un golazo imparable para Ederson. Esa era la última vez que Calafiori podría sonreír durante el encuentro.
Solo Savinho pudo levantar a un Etihad hundido por la pérdida de Rodri, que se volvió a desanimar con el ‘vuelo’ imparable de Gabriel, instantes antes del descanso, para poner por delante a los ‘gunners’. Sin embargo, la roja de Trossard dio esperanza al equipo de Pep. En el segundo acto, Savinho siguió a lo suyo. Con la defensa ‘gunner’ hundida, Calafiori sabía que tendría que exprimirse aún más.
Por eso, cada acción que ganaba el ex del Bolonia era celebrada por sus compañeros como si hubiese firmado otro gol. A su vez, el City quería igualar el choque desde la larga distancia. Al final, lo consiguió sobre la bocina, en el minuto 97, con un gol de John Stones a la salida de un córner. Pero ni Savinho ni Calafiori estaban sobre el campo.
CALAFIORI ACABÓ FUNDIDO
El primero, por decisión técnica, abandonó el verde en el 79′ para dar entrada a Jack Grealish y se tuvo que quedar sin su merecida ovación por el resultado. El segundo, obligado por el extremo, dejó su lugar a Jakub Kiwior en el 74′. Cuando Calafiori se había librado de Savinho (el brasileño ocupó el costado izquierdo en el minuto 69, cuando Doku fue sustituido), sus piernas dijeron ‘basta’. Simplemente, no podía más.
Calafiori, fundido tras defender a Savinho / EFE
La factura de tener que defender a un ‘ciclón’ como Savinho fue demasiado alta, incluso para un portento físico como el defensor ‘gunner’. Más allá del resultado, que tuvo sabor a victoria para el City y a derrota para el Arsenal, y la grave lesión de Rodri, Pep Guardiola tiene un motivo muy importante para sonreír: Savinho quiere hacer historia en el Etihad.
