El FC Barcelona está atento a la posibilidad de incorporar a un portero, aunque en estos momentos se decanta por esperar un buen rendimiento de Iñaki Peña, y en todo caso, acudir al mercado invernal. Ahora solo podría fichar a un guardameta con la carta de libertad y aunque también se barajan nombres, no se antoja como la mejor opción.
Dudas en algunos directivos
La idea del club es darle la oportunidad a Iñaki Peña. Al menos, hasta que se reabra el mercado de fichajes, el próximo mes de enero. El alicantino genera dudas en algunos directivos, pero se le quiere dar este margen al considerar también que el contexto deportivo de la pasada campaña era distinto al actual.
Tres opciones
Si el rendimiento de Iñaki permite esperar, el club baraja nombres para enero de guardametas que, por su situación o su proyección, serían interesantes. Uno de ellos es Álvaro Valles, que se ha quedado en la UD Las Palmas, pero que debe ver los partidos desde la grada al no haber llegado a un acuerdo de renovación. El sevillano está acostumbrado a jugar con el balón en los pies, así lo hizo la pasada campaña con García Pimienta, un aspecto que siempre se valora en el club azulgrana.
También está sin minutos, en este caso en el Valencia, Stole Dimitrievski, después de que finalmente se quedara Giorgi Mamardashvili. El macedonio se aseguró por contrato que, si se daba esta situación, podría salir por una cantidad asumible y el Barça le sigue la pista desde hace tiempo. Incluso, lo tuvo hecho con el club azulgrana en su día, pero la opción final fue la del brasileño Neto.
Y un tercer nombre es el de Guillaume Restes, titular en el Toulouse y de quien el Barça se planteó su fichaje el pasado verano, precisamente por si Iñaki Peña decidía cambiar de aires. El club pensó en una propuesta de 15 millones, más otros 5 en objetivos. Una cantidad asequible.
Como se avanzó en el programa ‘La Posesión’, sería una opción de presente, pero sobre todo, de futuro, a sus 19 años. Restes no solo es ágil bajo los palos, sino que domina mucho el juego con los pies.
Los que están libres
Entre los guardametas que están libres, los que más convencen son Keylor Navas (37 años) y Claudio Bravo (41), de los que se valora su experiencia. El chileno se ha ofrecido a su exclub, pero se ha retirado la última temporada.
Restes sería un futbolista que el Barça podría inscribir en la ventana del mercado de invierno. Ahora, de manera inmediata, solo puede fichar a jugadores que estén sin equipo, como sería el caso de Keylor Navas, Jordi Masip o Antonio Adán.
El perfil de Restes es muy diferente a estos futbolistas. Sería una opción de presente, pero sobre todo de futuro. Ter Stegen, de 32 años, estará prácticamente un año sin jugar y la portería quedaría solo en manos de Iñaki Peña.
El alicantino, a sus 25 años, está ante su gran oportunidad de consagrarse como portero del Barça. Está en una edad ideal y ya adquirió experiencia los dos meses y medio que estuvo bajo los palos por la operación en la espalda de Ter Stegen la pasada temporada.
Restes sería una competencia exigente para Iñaki Peña, quien ahora no tiene alternativa con solo Astralaga, el meta titular del Barça Atlètic en Primera Federación, y también con Diego Kochen, con enormes perspectivas, pero aún muy joven a sus 18 años.
Propuesta en verano
El Barça ya se planteó su fichaje el pasado verano precisamente por si Iñaki Peña decidía cambiar de aires. El club pensó en una propuesta de 15 millones, más otros 5 en objetivos. Una cantidad asequible para un guardamenta que apunta muy alto.
Restes no solo es ágil bajo los palos, sino que domina mucho el juego con los pies. Su técnico es Carlos Martínez, ex entrenador en las categorías inferiores del Barça, por lo que sería un jugador que se adaptaría rápido a la dinámica blaugrana.
