Tokio, 24 sep (EFECOM).- La firma siderúrgica nipona Nippon Steel ha vuelto a solicitar a las autoridades estadounidenses que analicen su oferta de compra de U.S. Steel, según publican los medios nipones tras las informaciones que apuntan a que la Casa Blanca bloqueará la operación.
La empresa japonesa ha presentado una nueva petición ante el Comité de Inversiones Extranjeras en Estados Unidos, con lo que la revisión del organismo federal podría prolongare hasta 90 días más, según dijeron fuentes próximas al caso a la agencia nipona Kyodo.
La petición llega después de que medios estadounidenses publicaran a comienzos de mes que el presidente estadounidense, Joe Biden, se está preparando para anunciar el bloqueo de la venta de U.S. Steel, valorada en unos 14.900 millones de dólares (poco más de 13.400 millones de euros).
Tanto Biden como la vicepresidenta y candidata demócrata a las elecciones presidenciales Kamala Harris y su rival republicano Donald Trump han expresado sus reticencias a la venta de U.S. Steel.
La nueva petición de la firma nipona podría estar dirigida a ganar tiempo hasta que pasen las elecciones presidenciales del 5 de noviembre, y obtener así un análisis más favorable por parte del citado comité, una agencia federal presidida por el Departamento del Tesoro y que tiene la capacidad de recomendar el bloqueo de operaciones consideradas contrarias a los intereses del país.
La operación, pensada para competir contra rivales y chinos y que daría lugar a la tercera mayor siderúrgica del mundo, se ha convertido en un tema político a pocas semanas para las elecciones presidenciales estadounidenses que en gran parte giran sobre la economía y la pérdida de capacidad industrial de Estados Unidos.
En la víspera, Nippon Steel publicó una carta abierta a los empleados de U.S. Steel, ante las críticas que ha deparado la oferta de adquisición por parte del poderoso sindicato estadounidense del sector United Steelworkers.
En el documento, el vicepresidente de Nippon Steel, Takahiro Mori, reafirma el compromiso de la empresa nipona de mantener la capacidad y los puestos de trabajo de las plantas estadounidenses a largo plazo, así como de expandir la producción doméstica.
«Seguimos comprometidos a trabajar de buena fe con United Steelworkers y colaborando con todos los empleados de U.S. Steel para un futuro mejor y más seguro tanto para U.S. Steel y sus trabajadores como para nuestras comunidades, el medio ambiente y la industria americana», señala el ejecutivo en la misiva. EFECOM
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