Endrick Felipe y Vinicius Júnior debieron ser expulsados por el colegiado gallego Muñiz Ruiz durante el partido entre el Real Madrid y el Alavés. Los dos brasileños se libraron de ver la tarjeta roja pese a merecerla en acciones claras que el árbitro pasó por alto de manera extraña, después de ser estricto hasta el límite, pero laxo cuando tuvo que ser contundente por dos acciones claras que pasó por alto.
Amarilla de Muñiz a Vinicius por protestar / Efe
Vinicius volvió a ser protagonista para lo bueno y para lo malo. Fabricó el 1-0 con una asistencia precisa a Lucas Vázquez en una jugada que llevó su firma. Y volvió a ser ese jugador insistente y retador en el uno contra uno que exige lo máximo a sus marcadores que no se ahorran nada para pararlo. En una jugada al límite en la que su marcador le hace una falta clara, Muñiz se equivoca obviando la entrada y pitando un córner que no era.
Risas y rodillazo
La acción desquició al brasileño, que reprochó la decisión del colegiado pero mirando y alentando a la grada. Muñiz lo interpretó como una desconsideración. “Por realizar observaciones de carácter técnico a una de mis decisiones”, escribió en el acta para mostrarle la amarilla. Vinicius debió ver la segunda amarilla en el minuto 91, cuando Ancelotti lo retiró del campo y el jugador vio el cartelón de alargue que se iba a los 6 minutos. Su reacción fue reírse en la cara del cuarto árbitro Gonzalo Romero Freixas. Muñiz hizo la vista gorda cuando debió amonestarlo con más razón que en la primera amarilla que le mostró.
Endrick abandona el lugar donde agredió a Mourino / Efe
Endrick tuvo que irse a la caseta antes que su compañero. A los 82 minutos Mouriño le empuja en el área cuando el balón se jugaba en la banda derecha. El brasileño, ni corto ni perezoso, reaccionó de mala manera yéndose hacia el jugador del Alavés para propinarle un rodillazo en sus partes. Muñiz solo mostró amarilla al delantero madridista, pero es jugada de VAR, y no fue a verla quizá por culpa de Figueroa Vázquez, que no le sugirió que la revisara. Así reflejó en el acta la acción: “… Fue amonestado por el siguiente motivo: por derribar de forma temeraria a un contrario”.
“Es roja y no hay más”
El Madrid debió quedarse con 10 los últimos 14 minutos (los 8 que quedaban para el final más los 6 de descuento), pero siguió sobre el campo. Además, Vinicius debió acabar en la ducha, porque su acción fue después de ser cambiarlo. “Lo de Endrick es roja, tendríamos que haber jugado los últimos 10 minutos con uno más. Es la intención de pegar de Endrick, es roja clara y nada más. Es roja, no hay más, no voy a hablar más del tema. Yo hablo de una jugada puntual y la roja es roja, ya está. Es verdad que a ellos les han sacado alguna amarilla de más, pero otra cosa es la acción de Endrick: es roja», subrayaba Luis García, técnico del Alavés, al final del partido.
El arbitraje de Muñiz Ruiz indignó al madridismo, con un Bernabéu que echaba fuego por sus rígidas decisiones sacando amarillas por cualquier protesta. El madridismo se queja de que esa vara de medir no la siguen los árbitros en otros partidos, y que solo se ceban con sus jugadores. El caso es que las dos decisiones de Muñiz Ruiz favorecieron al Real Madrid y, en este caso, perjudican al Atlético de Madrid, que verá enfrente a ambos jugadores el próximo domingo en el derbi que se jugará en el Metropolitano.
