Hay empates que saben a victoria, reza el tópico futbolero, pero el punto que sumó el pasado sábado el Estepona de Segunda RFEF ante el Juventud de Torremolinos sabe a Champions League.
El derbi de la Costa del Sol lo tenía todo. Se jugaba en Marbella, con gran ambiente y con un Juventud de Torremolinos que salió arrollador.
Los visitantes se pusieron con 0-2 al descanso, goles de Camacho y del exeuropeísta Servetti, pero con una roja a Iban Ribeiro justo antes del intermedio.
En el segundo periodo,el once de Torremolinos amplió su renta con gol de Gallego en el minuto 67. Cero a tres en todo lo alto y se llegaba al minuto 90. Todo resuelto…. aparentemente.
Porque ahí se desató el huracán del Estepona.
Primero Diego Mirapeix, excentral del Racing entre otros, anotaba el 1-3 en el minuto 91. Recoger el balón de la red, correr hasta el círculo central… el gol del honor.
Nada más sacar de centro los de Torremolinos, recuperación local y 2-3, obra de Rubén Mesa. Asombro en el Marbella Football Center.
Y del asombro al éxtasis esteponero cuando en el minuto 95 de encuentro Carrasco anotaba el gol del empate. El jugaador se ganó una amarilla por su celebración con la grada, pero le dio igual. El milagro estaba conseguido.
Un punto que rearma la moral de cualquier equipo. ¿Lo del Manchester United contra el Bayern? Una milonga…
