La fecha y el horario del derbi provocaron polémica desde el momento en que se conocieron, por aquello de que el Atlético ha tenido dos días menos para prepararlo que el Real Madrid, los que mediaron entre el partido de los blancos frente al Alavés, disputado el martes, y la visita rojiblanca a Vigo, que tuvo lugar el jueves. Pero eso se refería al ‘antes’. Una vez se dispute el duelo de rivalidad, sin embargo, toca Champions. Y por ahí también hay margen para la discusión: no es habitual que a equipos con la máxima competición continental en el horizonte se les coloque el encuentro previo del campeonato doméstico un domingo a las 21.00 horas.
De hecho directamente no podría hacerse si el duelo de Liga de Campeones se disputara el martes. Pero no es el caso. Tanto los de Ancelotti como los de Simeone tienen marcado en la agenda el miércoles, en ambos casos a domicilio, para medirse los primeros al Lille, para enfrentarse los segundos al Benfica. Así que el regulador ha entendido conveniente una fecha liguera, la de mañana, que apenas tendrán otros dos de los 36 equipos que juegan la fase de grupos europea. Y en ambos casos, bastantes horas antes de que el balón eche a rodar en el Metropolitano. El Girona rendirá visita al Celta a las 14:00 horas y el Aston Villa (único ejemplo foráneo) jugará en casa del Ipswich a las 15.00 horas.
De hecho para cuando se publiquen estas líneas habrá hasta diez conjuntos que aguarden ya su compromiso Champions, después de que atendieran a la competición local el viernes. Ucrania, Francia (en dos casos: Brest y PSG), Serbia, República Checa, Eslovaquia, Alemania, Italia, Bélgica y Portugal, por orden de horarios, decidieron fijar para el viernes partidos con equipos implicados. En España, sin embargo, se jugó un Valladolid-Mallorca. Cierto es, por otra parte, que la octava jornada de nuestra Liga ha sucedido a la séptima si una sola fecha de intervalo, en un arranque de temporada absolutamente frenético.
Para el sábado queda el grueso de la participación continental. Hasta 22 equipos saltarán al césped para jugarse los puntos antes de poner el foco en la cita de la Liga de Campeones. Habrá incluso dos duelos directos, Bayern-Bayer Leverkusen en Alemania y Bolonia-Atalanta en Italia, en un abanico de partidos que comienza a las 15.00 en Italia y termina a las 21.30 en Portugal (precisamente con el rival rojiblanco). El único equipo español al que se ha concedido ese día de margen es el Barcelona, que acude a Pamplona con la idea de mantener su pleno doméstico de victorias… antes de buscar la primera europea el martes frente al Young Boys.
Javier Tebas, presidente de LaLiga, aludió precisamente a los torneos que organiza la UEFA cuando quiso explicar el horario del derbi: «Hay muchas jornadas entre semana y competiciones europeas. Hay equipos que juegan jueves-domingo y se considera que es un descanso suficiente». Eso sí, el discurso del máximo dirigente de la patronal futbolística aludió después a «decisiones audiovisuales» que parecen estar en el origen de la explicación: es prioritario que los horarios ligueros respondan a los intereses de las televisiones con derechos, más allá de que eso perjudique deportivamente a los equipos españoles. El resultado que consigan después se desconoce aún, pero es un hecho que Atlético y Real Madrid acudirán al frente continental con menos descanso que sus rivales.
El derbi finalizará sobre las 23.00 horas, de modo que habrá menos de 72 hasta el duelo Champions. El lunes servirá apenas para un entrenamiento regenerativo de los que hayan tenido minutos en el Metropolitano y el martes será día de previa ya, con los respectivos viajes para ambos (la UEFA obliga a desplazarse un día antes, aunque haya excepciones que confirman la regla). Después de la Liga de Campeones aún se afrontará una nueva jornada doméstica antes del parón para selecciones, en este caso con menos descanso para el Real Madrid (recibe al Villarreal el sábado) que para el Atlético (visita a la Real el domingo). Sea como fuere, blancos y rojiblancos echarán el cierre al presente fin de semana. Serán los últimos de Europa.
