lunes, septiembre 30, 2024
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Operación 2026: el Barça se activa para renovar a sus piezas de presente y futuro

Finiquitado el verano, el FC Barcelona aprovecha la buena marcha del equipo para fijarse en el medio plazo. Son varios los jugadores estructurales que acaban contrato el 30 de junio de 2026 y el área deportiva, comandada por Deco, ya se ha puesto manos a la obra para renovarlos. Lamine Yamal, Pedri, Marc Bernal, Araujo o Frenkie de Jong son algunas de las carpetas calientes.

Cada caso es un mundo, pero sí es cierto que varios de ellos tienen algo en común: se trata de jugadores ya de presente que también deben significar el futuro del club, por lo que el Barça pretende abordar sus renovaciones con suficiente margen. Toda negociación requiere un proceso de intercambio de ‘golpes’ antes de materializarse, de ahí que la entidad quiera actuar con un buen colchón de tiempo. Sin prisa, pero sin pausa.

El objetivo del área deportiva es que ningún jugador empiece una temporada si su contrato expira al término de la misma. Es decir, si alguien no ve claro ampliar vínculo con el Barça, la entidad que preside Joan Laporta se decanta entonces por negociar un traspaso un año antes de que acabe el contrato. El club entiende que su fuerza se ve muy limitada cuando debe entablar negociaciones con jugadores que están a pocos meses de ser libres y que incluso por ley ya pueden firmar con otra entidad.

Lamine marcó dos goles ante el Girona

Lamine marcó dos goles ante el Girona / DANI BARBEITO

Lamine y Pedri, prioridades

Al ser menor de edad, Lamine pudo renovar solo hasta 2026, aunque quedó acordado un compromiso -ya obsoleto a la práctica- hasta el 30 de junio de 2030. Sin embargo, el Barça ya intuía que probablemente debería revisar antes el contrato del joven ‘crack’. Y viendo su rendimiento en el campo, andaba en lo cierto. De hecho, la previsión es que antes de que termine 2024 se inicien unas negociaciones que no serán sencillas para el club catalán. Lamine quiere seguir triunfando como culé pero su valor de mercado se ha disparado y su sueldo deberá incrementarse sustancialmente. Fuera hay clubes dispuestos a hacer locuras por el de Rocafonda.

Pedri también acaba contrato en 2026. El tinerfeño ha recuperado la continuidad de la que algunos problemas físicos le habían privado y en este arranque de curso ha vuelto a demostrar que su talento es diferencial en todos los escenarios, de ahí que sea el hombre más necesario para Hansi Flick en la medular. El de Tegueste tiene un valor de mercado de 80 millones y el Barça siempre ha tenido claro que por sus botas debe pasar el juego del equipo la próxima década. Deco ya mantuvo un acercamiento con los representantes del centrocampista a principios de verano que debe ser el preámbulo a una negociación todavía fría. Al igual que Lamine, la cláusula de rescisión de Pedri es de 1.000 ‘kilos’.

Marc Bernal, en muletas presenciando el FC Barcelona - Valladolid

Marc Bernal, en muletas presenciando el FC Barcelona – Valladolid / JAVI FERRÁNDIZ

Bernal y Fermín, calientes

Tal como adelantó SPORT, el Barça tiene muy avanzado un nuevo contrato para Marc Bernal, que verá mejorada su ficha anual a pesar de que por culpa de la lesión no podrá alcanzar las variables pactadas. Además, y aunque no se anunciará porque el centrocampista aún no tiene 18 años, ya existe un acuerdo para que Bernal quede atado hasta 2029 una vez expire su actual contrato, que también acaba ‘oficialmente’ en 2026. En el club creen que Marc, cuya cláusula de rescisión también subirá drásticamente -ahora es de 20-, puede marcar una época en el pivote defensivo y no dudan lo más mínimo a la hora de catalogarlo como pieza estructural.

Otro que renovará próximamente es Fermín López, como también informó este diario en mayo. El onubense la rompió el curso pasado con 11 goles -solo Lewandowski marcó más- y el Barça quiere premiar su rendimiento con una mejora salarial y ampliación contractual. El vínculo vigente acaba en 2027 pero la entidad lo extenderá una o dos temporadas más porque cree en el potencial de Fermín. De hecho, su ‘explosión’ fue uno de los varios motivos por los que el Barça se atrevió a prescindir de Gündogan.

Las negociaciones con Gerard Martín también avanzan. El lateral acaba contrato en 2025 pero el club tiene la opción de aplicar un año más unilateralmente. Pese a ello, ya se han producido varios contactos entre Deco y los agentes del carrilero que han supuesto progresos muy significativos. Difícilmente se producirá antes del próximo parón de selecciones, pero Gerard renovará. Las dos partes han sentado ya las bases de la que será una ampliación y mejora, pues la ficha del ex del Cornellà es austera incluso en comparación con algunos jugadores del Barça Atlètic.

Frenkie de Jong, en la presentación del Barça antes del trofeo Joan Gamper-2024.

Frenkie de Jong, en la presentación del Barça antes del trofeo Joan Gamper-2024. / FC Barcelona

De Jong, Araujo y Christensen, todavía fríos

Más tiempo requerirán los casos de Frenkie de Jong, Araujo y Christensen. O al menos los dos primeros, ya que es donde más diferencias de percepción entre las partes parece haber. Al Barça le gustaría ampliar el contrato de ambos más allá de 2026 porque les considera titularísimos, pero no a cualquier precio. El charrúa aspira a una mejora salarial que se le prometió cuando renovó por última vez. Y el ex del Ajax, a no ver reducidos sus emolumentos, algo que pretende el club.

A día de hoy aún no hay negociaciones por De Jong ni tampoco por Araujo, que com es normal se centra únicamente en su proceso de recuperación para volver lo antes posible. Los dos saben por boca del Barça que el club quiere renovarlos, pero hará falta encontrar un punto medio y todo apunta a que este no llegará antes de 2025. Eso sí, hay que remarcar que tanto la voluntad de Frenkie como la de Ronald es la de seguir en el Barça, donde son felices.

Respecto a Christensen, en el club están muy contentos con su rendimiento y actitud y la intención inicial también es renovarle más allá de 2026. Hoy por hoy, sin embargo, no hay conversaciones en marcha. El dinero no sería un obstáculo, pero hay otros elementos que entran en juego: los problemas físicos le están privando de continuidad y, por otro lado, el Barça escucharía ofertas si estas fueran interesantes. Se cuenta con Christensen pero no como pieza estructural e innegociable. Todo está muy abierto con Andreas y el protagonismo que le otorgue Flick puede decantar la balanza hacia un lado u otro el próximo verano.

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