¿Rectificará Luis Enrique con Dembélé?

Ni la entidad del partido ni la competición intimidaron a Luis Enrique. El caldo de cultivo no era el idóneo para afrontar un duelo de Champions, menos en casa del subcampeón de la Premier League como el Arsenal. Pero el asturiano no se casa con nada ni nadie. No lo hizo con Mbappé, tampoco lo iba a hacer con Dembélé. 

«Parece que nunca hemos perdido con Ousmane… perdimos en Newcastle, en Milán, Dortmund, en casa contra el Barça…», tiraba con bala el asturiano, poniendo al ‘Mosquito’ a los pies de los caballos. Y le salió el tiro por la culata. Ante el Arsenal cayó y dando una imagen deplorable para un proyecto multimillonario como el de Al-Khelaïfi. De momento, el patrón se ha aliado con su entrenador. Recelen de las veletas.

A Luis Enrique no le queman los focos, como él mismo ha manifestado en varias ocasiones, le gusta asumir protagonismo y los éxitos empiezan a serle esquivos, salvo ese coto privado de caza que se llama Ligue 1. ¿Les recuerda a algún otro entrenador? Sí, el asturiano sufre un proceso de ‘mourinhización’. Un estado que el barcelonismo comprobó cuando celebró como un poseso la remontada de su PSG en Montjuïc, al igual que años antes había hecho el de Setúbal en la noche de los aspersores. 

La docuserie de Lucho

En Londres al PSG le faltó desequilibrio ante un Arsenal con mucho oficio y que aprovechó los fallos de un desastroso Donnarumma, otro día hablaremos de porteros sobrevalorados, para pintar la cara a los parisinos. Contra el Girona le salvó la campana, ante los ‘gunners’ no hubo tanta suerte. El monólogo del segundo tiempo no se tradujo en el marcador y, por momentos, el PSG echó en falta la anarquía de Dembélé para resquebrajar el rigor inglés. El ‘Mosquito’ es una moneda al aire, pero mejor tenerla en el bolsillo que en casa. El domingo toca baño y masaje en Niza. Visto lo visto en el Emirates Stadium, tocará seguir de cerca el culebrón Luis Enrique y Dembélé. ¿Seguirá el castigo? ¿Se filtrarán los motivos de su indisciplina? El segundo episodio de la docuserie de Luis Enrique, en la Costa Azul.