Yolanda Díaz se ha pronunciado ante los medios para lanzar un mensaje totalmente opuesto al que envió tras el escrutinio de las elecciones europeas: “No me voy, me quedo. Me quedo dentro de Sumar, y ahora Sumar va a dar un debate tranquilo”. Además, ha querido explicar que su primer anuncio había sido nacida del hecho de tener que asumir “responsabilidades”.
Y es que la noche del domingo 9 de junio, tras los comicios no fue como Sumar esperaba y solo consiguió tres diputados. En consecuencia, Yolanda Díaz anunció esa misma noche una “revisión” de por qué no habían conseguido enganchar a los votantes a sus propuestas, para justo después comunicar que dejaba la dirección del partido, ahora hay un nuevo giro de guion.
Este adiós, sin embargo, no iba a significar alejarse del todo del partido, puesto que con estas últimas palabras ha manifestado su intención de continuar en todos los espacios, incluido el de Coordinadora Ejecutiva. La vicepresidenta se encontraba por aquel entonces en Suiza, donde ha hablado con los medios y se ha mostrado segura: “A partir de ahora me van a ver ustedes haciendo lo que hago aquí, defender a los trabajadores del mundo. Además, ha asegurado que su intención sigue siendo “un giro de guion”.
De este modo, parece que Yolanda Díaz dejará de ser la cabeza visible de la formación que ella misma fundó hace menos de un año pero sigue con intenciones de mantener su influencia y retener funciones como la de seguir coordinando el grupo parlamentario y en el Gobierno. Al haber dado un paso atrás, eso sí, en la Coordinación general, se abre la puerta a un nuevo “reparto de tareas”, que se dilucidarán en la reunión del Grupo de Coordinación de Sumar de este próximo jueves.
Yolanda Díaz había ido hasta Suiza por motivos de trabajo, pero aún así ha podido descansar un poco y encontrar esa “tranquilidad” que tanto le faltaba, en las antípodas de lo que sus palabras han generado en Madrid durante los últimos días, forzando el debate a cómo se verá la izquierda dentro de 10 o 15 años.
Las críticas y reacciones ya han llegado de formaciones como IU y Compromís, a los que no les ha convencido de la mala idea del modus operandi de la coordinadora. Al contrario está Íñigo Errejón, que ha mantenido a Díaz como “el mayor activo y político y electoral” del medio
