El Reino Unido expulsará al agregado de defensa de Rusia, retirará el estatus diplomático a algunas propiedades y limitará la duración de los visados diplomáticos rusos, anunció este miércoles el gobierno.
En un discurso ante el Parlamento el miércoles, el ministro británico del Interior, James Cleverly, declaró que la medida del Gobierno británico seguía una pauta de “actividad maligna” de Rusia en el Reino Unido y Europa.
“Expulsaremos al agregado de defensa ruso, que es un oficial de inteligencia militar no declarado”, dijo Cleverly.
El funcionario agregó que el país iba a retirar el estatus de locales diplomáticos a varias propiedades vinculadas a Rusia en el Reino Unido que según el gobierno Moscú “utilizó con fines de inteligencia”. Entre los edificios a los que se le retiró el estatus diplomático se encuentra Seacox Heath, un lujoso palacio de 50 habitaciones utilizado como retiro de fin de semana por el personal de la embajada rusa.
Cleverly también anunció nuevas restricciones a los visados diplomáticos rusos, “incluida la limitación del tiempo que los diplomáticos rusos pueden pasar en el Reino Unido”.
Por otro lado, el ministro británico denunció “un patrón mucho más amplio de actividad maligna rusa en toda Europa”.
“Entre ellas se incluyen planes de actividades de sabotaje contra la ayuda militar a Ucrania, en Alemania y en Polonia, espionaje en Bulgaria y en Italia, ciberataques y actividades de desinformación, violaciones del espacio aéreo e interferencias del GPS con impacto en la aviación civil”, dijo Cleverly.
Gran Bretaña ha introducido varias oleadas de sanciones a empresas y particulares rusos desde que Moscú lanzó su invasión a gran escala de Ucrania, y Cleverly afirmó que el gobierno conservador no vacilaría en su apoyo a Kiev.
La semana pasada, los miembros de la OTAN se declararon “profundamente preocupados” por los recientes ciberataques que atribuyeron a Rusia y que afectaron a la República Checa, Estonia, Alemania, Letonia, Lituania, Polonia y Gran Bretaña.
En abril, un británico fue acusado de supuesta actividad hostil de Estado en beneficio de Rusia, entre otras cosas por haber reclutado presuntamente a otras personas para un incendio provocado en una propiedad comercial vinculada a Ucrania en Londres.
El miércoles, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, Maria Zakharova, afirmó que las acusaciones británicas sobre la implicación rusa en el incendio provocado eran absurdas y formaban parte de una guerra de información.
